Mañana, 31 de mayo es el Día Mundial Sin Tabaco, una fecha destacada en el calendario global, ya que busca crear conciencia sobre los peligros del tabaquismo y promover un estilo de vida libre de humo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 8 millones de personas mueren cada año debido al consumo de tabaco, siendo más de 7 millones de muertes atribuibles al consumo directo y aproximadamente 1,2 millones al tabaquismo pasivo.
En Argentina, mueren unas 45.000 personas por año por enfermedades relacionadas con el tabaco. Esto representa el 14% de todas las muertes en el país. La mitad de las personas fumadoras muere de una enfermedad relacionada al consumo de tabaco y viven en promedio 10-15 años menos que las no fumadoras.
En el marco de la conmemoración del Día Mundial sin Tabaco, la Red de Hospitales Universitarios de la Universidad de Buenos Aires (UBA) presentó un informe que busca concientizar sobre las implicancias para la salud que acarrea el tabaquismo, una epidemia que mata hasta a la mitad de las personas que consumen cigarrillos. Más allá de la tendencia global de disminución del hábito de fumar, en Argentina alrededor del 14 por ciento de las muertes que se producen “pueden ser atribuídas al tabaquismo”, señala el estudio.
El consumo de tabaco continúa siendo un grave problema de salud en el país, a pesar de que en los últimos años ha experimentado una disminución del 25 por ciento. Sin embargo, según el doctor Diego Sánchez Gelós, coordinador del programa de Cesación Tabáquica del Hospital de Clínicas de la UBA, todavía se registra un preocupante número de muertes relacionadas con el tabaquismo, alcanzando las 45 mil por año.
La doctora Iris Boyeras Navarro, neumonóloga del instituto de oncología A. Roffo, destaca las enfermedades cardíacas como una de las principales causas de muerte, provocando cerca de 10 mil fallecimientos anuales. Además, el tabaquismo también es responsable de 7,800 muertes por enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y 12,700 casos de cáncer.
La médica advierte sobre la preocupante tendencia de inicio temprano en el consumo de tabaco, con una edad promedio de entre 11 y 13 años. El rango de mayor consumo se encuentra entre los 25 y 49 años, aunque el pico de consumo de cigarrillos se da entre los 28 y 35 años.
Si bien abandonar el hábito de fumar puede resultar desafiante, el doctor Diego Sánchez Gelós afirma que aquellos que buscan ayuda profesional tienen hasta un 36% de éxito en su intento de dejar el cigarrillo, mientras que aquellos que intentan hacerlo por cuenta propia apenas alcanzan un 6% de probabilidad de éxito. Esto resalta la importancia de buscar apoyo y asistencia especializada para lograr una cesación efectiva del consumo de tabaco.
Con el fin de destacar los beneficios de dejar de fumar, Daniel Basilio, gerente médico de Oncología del Clúster Andino de Pfizer, enfatiza la importancia de esta fecha. «El Día Mundial Sin Fumar nos brinda la oportunidad de promover un estilo de vida más saludable y concienciar sobre los peligros del tabaquismo. Es importante tomar medidas para reducir el consumo de tabaco y crear entornos libres de humo que fomenten la salud y el bienestar de todos, a nivel personal y en nuestro entorno».
Los efectos positivos en la salud de dejar de fumar son notables tanto a corto como a largo plazo, según señala Pfizer:
- A los 20 minutos de haber dejado de fumar, el ritmo cardíaco disminuye y la presión arterial se estabiliza.
- Después de 2-12 semanas, mejora la circulación sanguínea y aumenta la función pulmonar.
- En 1-9 meses, disminuye la tos y la dificultad para respirar.
- Al cabo de 1 año, el riesgo de cardiopatía coronaria es un 50% inferior al de un fumador.
- A los 5 años, el riesgo de accidente cerebrovascular se iguala al de un no fumador entre 5 y 15 años después de haber dejado de fumar.
- Después de 10 años, el riesgo de cáncer de pulmón disminuye a la mitad en comparación con el de un fumador, y también se reduce el riesgo de cáncer de boca, garganta, esófago, vejiga y páncreas.
En conclusión, el Día Mundial Sin Fumar nos invita a reflexionar sobre los peligros del tabaquismo y nos brinda la oportunidad de adoptar un estilo de vida más saludable. Dejar de fumar no solo tiene beneficios a largo plazo, sino que también conlleva mejoras significativas en la salud a corto plazo. Es importante que cada individuo tome medidas para reducir el consumo de tabaco y contribuya a la creación de entornos libres de humo, promoviendo así la salud y el bienestar de todos.
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