Son pocos los argentinos que ven el futuro con algo de optimismo. Según una encuesta de opinión pública a nivel realizada por la UADE y Voices entre más de 1.300 personas de todo el país, el 66% de los consultados consideró que en los próximos 10 años la situación de pobreza estará peor o mucho peor que en la actualidad.
Sin embargo, entre los jóvenes las perspectivas negativas son aún mayores: el 71% de los que tienen entre 16 y 24 años y el 77% de los que tienen entre 25 y 34 años creen que en la próxima década habrá un crecimiento de la pobreza.
Más de la mitad de los argentinos preferiría vivir en otro país. Y esa idea es más fuerte entre los más jóvenes: un 70% de los que tienen entre 16 y 24 años consideran que estarían mejor si no vivieran en la Argentina.
El 71% de los que tienen entre 16 y 24 años y el 77% de los que tienen entre 25 y 34 años creen que en la próxima década habrá un crecimiento de la pobreza
España (25%), Estados Unidos (11%) e Italia (9%) son los tres principales destinos preferidos por aquellos que quisieran vivir en otro país que no fuera la Argentina. En tanto, seis de cada 10 argentinos que desearían vivir en el exterior ven a las perspectivas económicas de Argentina como la principal motivación para emigrar. Este motivo es el que manifestaron especialmente el 70% de los jóvenes que expresaron sus deseos de vivir fuera del país.
El 58% de quienes dijeron que les gustaría vivir en el exterior mencionó a las mejores posibilidades de desarrollo profesional como un segundo motivo para irse, opinión que también crece a medida que desciende la edad. Por el contrario, los que quieren permanecer en el país encontraron en los motivos familiares (50%) y el compromiso con el país (37%) los principales fundamentos para justificar su decisión.
Por otro lado, seis de cada 10 encuestados sostuvieron que la situación de la seguridad será “peor o mucho peor” que la actual. El porcentaje sube al 71% entre los de 25 a 34 años.
Más de la mitad de los argentinos (57%) afirma que la situación económica general estará peor o mucho peor dentro de los próximos 10 años. La perspectiva de los jóvenes confirma este pesimismo: el 62% de quienes tienen 16 a 24 años y el 66% de quienes tienen 25 a 34 años están de acuerdo con esta postura.
En el corto plazo, en los próximos dos años, el 36% de los encuestados expresó cierto optimismo sobre el futuro económico personal, en tanto consideró que su situación estaría mejor o mucho mejor. Para el mediano plazo (5 años) dicho optimismo asciende a 46%, y en el largo plazo (10 años) más de la mitad de los argentinos (51%) estima que estará mejor o mucho mejor. En todos los casos, casi 3 de cada 10 pronosticaron un empeoramiento.
Cuatro de cada 10 argentinos (40%) destacaron a su situación económica personal como su principal preocupación a futuro. Le sigue en grado de preocupación: la falta de progreso personal (30% del total general y 54% de los jóvenes entre 16 y 24 años que pertenecen a este grupo), su salud (mencionada por 1 de cada 4 encuestados, 26%) y la inseguridad (24%). Estas dos últimas preocupaciones fueron mayormente reconocidas por aquellos encuestados que pertenecen a grupos etarios de mayor edad.
Más de la mitad de los encuestados (55%) aseguró que el alto nivel de desempleo es la principal dificultad de los jóvenes para encontrar trabajo. Entre los jóvenes, esa opinión fue respaldada por el 50% de ellos.
Entre otras dificultades que se cree que encuentran los jóvenes a la hora de conseguir trabajo, se destacan: las excesivas exigencias de experiencia (elegido por el 35% de los respondientes, entre los cuales un 47% son jóvenes de entre 16 y 24 años), la falta de educación (32%) y los bajos sueldos (21%).
El estudio también indagó en la percepción del nivel de vida de los encuestados con respecto a sus padres y sus hijos. En ese caso, solo el 22% asegura que es más rico que sus padres (32% se visualiza más pobre) mientras que el 43% sostiene que sus hijos serán más ricos cuando tengan su misma edad (el 18% cree que serán más pobres).
Entre los más jóvenes (de 16 a 24 años) hay una percepción de estancamiento en la comparación con el nivel de vida de sus padres, donde el 55% asegura que su nivel sería casi igual al de ellos.
“La situación económica y la falta de progreso son las principales preocupaciones de los argentinos en lo que respecta a su futuro personal. Resulta alarmante que la mitad de los argentinos esté dispuesta a emigrar, voluntad que crece al 70% entre los más jóvenes”, dijo Solange Finkelsztein, coordinadora de Investigaciones de UADE.
“Más de la mitad de los argentinos muestra una visión pesimista sobre el futuro del país a nivel laboral, seguridad y economía, situación que se agrava aún más cuando de pobreza se trata: dos de cada tres creen que esta empeorará en los próximos 10 años”, agregó.