La espirulina es considerada un tipo de alga unicelular que se utiliza por ser un superalimento debido a su alta concentración de nutrientes esenciales. Se ha utilizado durante siglos como fuente de alimento en diversas culturas y se ha convertido en un suplemento dietético popular en todo el mundo.
Este suplemento es valorado por sus múltiples beneficios para la salud gracias a la combinación de sus componentes. Entre ellos se destacan: proteínas de alta calidad, minerales, como hierro, zinc y magnesio, ácidos grasos esenciales, como el gamma-linoleico, así como carotenoides y vitaminas C y E.
Cabe destacar que la pseudovitamina B12 que contienen los suplementos no es una adecuada fuente de B12, es necesario obtenerla de la alimentación. Además, contiene oligoelementos esenciales como hierro, yodo, selenio, zinc, cobre, manganeso y cromo, que pueden ser enriquecidos durante el cultivo de estas cianobacterias.
Si bien no son numerosos los estudios realizados alrededor de este complemento dietario, se ha confirmado que la dosis diaria típica se encuentra entre 1 y 5 gramos/día. Por tanto, es importante seguir las recomendaciones de dosificación del fabricante y, antes de consumir espirulina con fines terapéuticos es imprescindible consultar con un profesional de la salud para determinar la dosis más adecuada para cada caso.
La espirulina como suplemento dietético o alimenticio generado a partir de cianobacterias, bacterias capaces de realizar fotosíntesis oxigénica, tiene diversos beneficios y propiedades, por eso te invitamos a conocerlas:
- Alta densidad nutricional: La espirulina es rica en proteínas de alta calidad y contiene todos los aminoácidos esenciales que nuestro cuerpo necesita. También es una fuente de vitaminas y minerales, como hierro, calcio, magnesio, vitamina A, vitamina K y vitaminas del grupo B.
- Antioxidantes: Contiene antioxidantes poderosos, como la ficocianina, que ayudan a proteger nuestro cuerpo contra el estrés oxidativo y el daño de los radicales libres.
- Fortalecimiento del sistema inmunológico: La espirulina ha demostrado mejorar la función del sistema inmunológico. Los estudios han sugerido que puede aumentar la producción de anticuerpos, aumentar la actividad de las células inmunitarias y mejorar la respuesta inflamatoria.
- Propiedades antiinflamatorias: La presencia de ácidos grasos omega-3 en la espirulina puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Esto puede ser beneficioso para personas que sufren de enfermedades inflamatorias crónicas, como la artritis reumatoide.
- Control del azúcar en la sangre: Algunas investigaciones indican que la espirulina puede ayudar a regular los niveles de azúcar en la sangre. Esto podría ser útil para personas con diabetes tipo 2 o aquellas que buscan mantener niveles saludables de azúcar en general.
- Apoyo cardiovascular: Se ha sugerido que la espirulina puede tener efectos positivos en la salud cardiovascular. Algunos estudios han encontrado que puede ayudar a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos, así como a regular la presión arterial.
- Reduce los síntomas asociados a la rinitis: se ha comprobado que la espirulina mejora significativamente los síntomas de la rinitis alérgica como los estornudos, la congestión nasal y el prurito.