El cervecero añadió a su amplia cartilla de actividades el baby fútbol, para niños de 5 a 11 años. También hay fecha para el comienzo del fútbol femenino en el club.
Dentro de un marco donde todo cuesta el doble, donde los resultados deportivos pasan a segundo plano si se logra estar al día económicamente, el Quilmes Atlético Club incursiona en este inicio del 2020 algunas actividades que el contexto demandaba.
Las autoridades escucharon las peticiones del coordinador de infantiles Hugo Magnani y el baby fútbol vio la luz. «Él siempre manifestó que estábamos necesitando esa parte, una categoría más que sea formativa, hicimos un esfuerzo y se dio», nos dijo el vicepresidente 1° Jairo Gomelsky. Para esto, se realizó un convenio con la Universidad Nacional de Quilmes, donde se va a desarrollar la disciplina haciendo una selección también con los chicos de infantiles. Esta disciplina tuvo su primera fecha por el Torneo de Verano el pasado sábado 1 de febrero en el Club 12 de Octubre ante Remolcador Guaraní, obteniendo cinco victorias, un empate y una derrota en las distintas categorías.
Además, en sintonía con la evolución contemporánea de la sociedad en materia de igualdad de género, Quilmes tendrá representación en el próximo campeonato de fútbol femenino, que arrancará en julio. Gomelsky expresó que «estamos escuchando varios proyectos y hay uno muy encaminado, pero el próximo campeonato el club tendrá equipo de fútbol femenino; como recién nos estamos afiliando, arrancaríamos en la categoría más baja, la C. Como el torneo empieza en julio, queremos que las chicas empiecen a entrenar desde marzo, así llegan afiladas al certamen y pueden representar de la mejor manera al club». Para esto, el club deberá atravesar una adaptación: una de estas son los proyectos edilicios, ya que se tendrá que construir un vestuario para mujeres, debido a que ni el Centenario ni el predio de Alsina y Lora lo tienen.
Sobre la convocatoria, Gomelsky manifestó que «tenemos un convenio con la Liga de fútbol amateur femenino de Quilmes para que sea tipo una selección. La idea es que cada año se arme la selección de la liga femenina de Quilmes y que represente al club» y añadió que «esto se hace obviamente con fichajes en AFA, cuerpos técnicos, médicos y psicólogos deportivos. Uno de los espacios donde van a entrenar en físico va a ser en el estadio de Hockey, y estamos buscando otras sedes donde puedan entrenar lo táctico seis horas semanales; todo lo que hacemos es para llevarlo al mayor profesionalismo posible, porque si nos metemos en algo, es para ser competitivos».
En cuanto a las demás actividades, desde el club se intenta que cada deportista que se ponga la camiseta de Quilmes sienta un sentido de pertenencia que les arraigue a la institución. ¿Cómo se logra esto? con lo que Gomelsky llamó detalles: «antes, si cualquier disciplina quería usar el gimnasio lo tenía que pagar, hoy no porque se les reconoce como deportista del club, entonces siente que representa a un club que lo apoya. Desde el primer jugador de fútbol infantil hasta el último jugador de básquet tienen que sentir que sus necesidades son escuchadas, de cualquier manera, como las chicas de gimnasia artística, a las que se les consiguió descuentos en los micros para que viajen a su pretemporada en Mar del Plata».
Quilmes Atlético Club es una institución que busca su sustentabilidad con la generación de recursos, para que el lugar no sea pan para hoy hambre para mañana. «Esa debería ser la premisa madre de todo club, si bien no te garantiza nada en lo deportivo, te da la posibilidad de contratar buenos jugadores» afirmó Gomelsky. En el fútbol de primera, el día que se contrató al jugador Mariano Pavone se triplicó la caja diaria de la sede, generando un claro efecto de contagio mde amor por el club. Un amor que intenta ser de ida y vuelta.