A medida que las personas envejecen, su sistema inmunológico cambia y generalmente promueve más inflamación en el cuerpo. Esto, a su vez, puede dañar el cerebro y también aumentar el riesgo de demencia. Sin embargo, una dieta antiinflamatoria con más frutas, verduras, legumbres, té o café parece tener un cierto efecto protector.
Científicos de la Universidad Kapodistriana de Atenas, en Grecia, calificaron la dieta de más de 1,000 personas mayores con alimentos antiinflamatorios y los siguieron durante un promedio de tres años.
Los investigadores dividieron a los participantes en tres grupos iguales: aquellos con las puntuaciones inflamatorias dietéticas más bajas, los de las medias y los de las más altas.
Los participantes en el grupo con los niveles más bajos de inflamación consumieron un promedio de veinte porciones de fruta, 19 porciones de verduras, cuatro porciones de porotos u otras legumbres, y once tazas de café o té a la semana, informa el equipo.
Por otro lado, los participantes del grupo con los niveles más altos de inflamación habrían comido en promedio solo nueve porciones de fruta, diez porciones de verduras, dos porciones de legumbres y nueve tazas de café o té por semana.
Después de ajustar por edad, sexo y educación, los investigadores encontraron que cada aumento de un punto en la calificación inflamatoria dietética se asoció con un incremento del 21% en el riesgo de demencia. En comparación con el tercio más bajo de los participantes que consumieron la dieta menos inflamatoria, los del tercio superior tenían tres veces más probabilidades de desarrollar demencia.
“Estos hallazgos sugieren que las personas pueden proteger sus cerebros comiendo más sano”, asegura Nikolaos Scarmeas, quien dirigió la investigación y agregó que: “Eso, a su vez, podría ayudar a informar recomendaciones dietéticas más personalizadas y precisas y otras estrategias para mantener la salud cognitiva”.
Dado que la investigación es solo un estudio observacional, los resultados no prueban que una dieta antiinflamatoria prevenga directamente el envejecimiento cerebral y el desarrollo de demencia, sino que solo se encontró una conexión, informan los investigadores.
Las legumbres en la dieta de los argentinos
“Es un grupo de alimentos prácticamente olvidado por la cultura argentina. Si uno pregunta en líneas generales sobre las legumbres, o cuál es la primera asociación al escuchar el término, muchas personas erróneamente piensan que solo hay que consumirlas si se lleva un tipo de alimentación del estilo vegano o de tipo vegetariano”, explica a Con Bienestar la licenciada en nutrición María Luz Sanz (M.N. 7520).
Estas son las principales legumbres: arvejas de tipo secas; lentejas que vienen en múltiples variedades ( rojas, turcas, lentejones); soja; porotos, que también vienen en múltiples variedades (aduki, alubia, pallares); garbanzos; habas y maní, que, por el tipo de composición que tiene, muchos la incluyen dentro de los frutos secos.