En la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) están fabricando un satélite del tamaño de un pan lactal que podrá realizar observaciones atmosféricas y del suelo. La Universidad dará un paso hacia la conquista del espacio con la fabricación y el lanzamiento de su propio nanosatélite, el USAT I, el cual será el primero del programa “Satélite Universitario” .
El USAT I, no es un satélite como el que generalmente está en el imaginario de muchas personas, no pesa toneladas, sino que tiene alrededor de 4 kilos y unas dimensiones de 10 por 10 por 34 cm. Este proyecto es el resultado de un esfuerzo conjunto entre el Centro Tecnológico Aeroespacial (CTA) de la Facultad de Ingeniería y el grupo de Sistemas Electrónicos de Navegación y Telecomunicaciones (SENyT).
Sonia Botta, ingeniera del CTA y coordinadora del proyecto, explica que el USAT I tiene como objetivo demostrar el funcionamiento del sistema GNSS (Global Navigation Satellite System), una herramienta crucial en navegación y determinación orbital, así como para mediciones a través de la técnica de radio-ocultación.
El GNSS es un término genérico que engloba a todas las constelaciones satelitales diseñadas para su uso en navegación, siendo el GPS uno de los ejemplos más conocidos. El receptor GNSS del USAT I permitirá detectar señales de GPS que viajan a través de la atmósfera y la tierra, demostrando su utilidad en la navegación.
Además de la navegación, el satélite será capaz de probar dos técnicas científicas fundamentales: la radio-ocultación GNSS y la reflectometría GNSS. La radio-ocultación se utiliza para medir la refracción de las señales GNSS en la atmósfera y puede ayudar a estudiar las características de las capas superiores e inferiores de la atmósfera, como la ionósfera y la troposfera. Por otro lado, la reflectometría GNSS utiliza las señales GNSS reflejadas en la superficie terrestre para medir características como la humedad del suelo, la cobertura de vegetación y la altimetría.
La coordinadora del proyecto, Sonia Botta, enfatiza que el USAT I tiene el potencial de realizar observaciones atmosféricas y del suelo en territorio argentino, pero su órbita global abre la posibilidad de colaboración con otros países.
El USAT I completó con éxito la Revisión Crítica de Diseño en septiembre del año pasado, un paso fundamental para la construcción del satélite. En la actualidad, se están realizando las últimas compras necesarias para comenzar la construcción del modelo de vuelo.
La fecha de lanzamiento está sujeta a la finalización del satélite y a las oportunidades de lanzamiento, pero se espera que tenga lugar antes de fin de año, entre octubre y noviembre.