La Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR), en colaboración con el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), ha lanzado una guía científica que destaca la rica biodiversidad de los humedales en la Cuenca Matanza Riachuelo. Disponible en la página web de ACUMAR, la guía titulada «Plantas de Humedal de la Cuenca Matanza Riachuelo» busca ampliar el conocimiento sobre estas comunidades vegetales autóctonas y promover la conservación de los ecosistemas.
El presidente de ACUMAR, Martín Sabbatella, enfatizó la importancia de este trabajo científico en la construcción de un aporte para el futuro. «Buscamos contribuir al conocimiento de la Cuenca como un medio para favorecer el ordenamiento ambiental del territorio, poner en valor el patrimonio natural y cuidar la biodiversidad», declaró Sabbatella.
La guía es parte de las acciones emprendidas por ACUMAR en el marco del Inventario de Humedales de la Cuenca Matanza Riachuelo, destacando la relevancia de estos ecosistemas estratégicos. El trabajo de investigación y desarrollo realizado junto al CONICET resalta la diversidad de plantas presentes en arroyos, lagunas y bañados de la Cuenca y cuencas vecinas del área metropolitana.
Además de la guía científica, se ha publicado un folleto de difusión titulado «Los humedales y sus plantas», dirigido al público en general. El director General de Gestión Política y Social de ACUMAR, Antolín Magallanes, expresó su deseo de que estas publicaciones sirvan como herramientas para municipios, docentes, naturalistas y el público en general, proporcionándoles recursos para identificar y comprender la importancia de los humedales en su entorno.
Las plantas destacadas en la guía son indicadoras clave de los ecosistemas de humedales, incluso cuando estos se encuentran temporalmente secos. ACUMAR y CONICET buscan, a través de estas publicaciones, fomentar la empatía por los bienes comunes, así como subrayar la importancia de la conservación y el uso sostenible de los humedales para la recomposición ambiental y la calidad de vida de los habitantes de la Cuenca Matanza Riachuelo. Estas iniciativas no solo aportan herramientas científicas para el ordenamiento ambiental del territorio, sino que también resaltan las funciones ecosistémicas vitales que desempeñan los humedales en la sostenibilidad del planeta.