El Foro Regional en Defensa del Río de la Plata, la Salud y el Medio Ambiente expresó su rechazo a la convocatoria a consulta pública realizada por la Municipalidad de Berazategui para aprobar la instalación del barrio cerrado Lagoon Hudson. La entidad ambientalista argumenta que la consulta presenta irregularidades que van en contra del Acuerdo de Escazú.
La convocatoria, publicada el 22 de enero en la página web municipal, otorga a los vecinos de Berazategui solo 11 días para revisar 600 páginas de información técnica sobre el proyecto, dificultando su comprensión y violando disposiciones del Acuerdo de Escazú. Además, la consulta se realiza después de que la empresa presentara el informe de evaluación de impacto ambiental en octubre de 2021, contradiciendo el artículo 7.4 del mencionado acuerdo.
El Foro también señala que una parte significativa del barrio cerrado ya está construida desde 2014 sin realizar consultas previas. La opacidad del Municipio se refleja en la falta de publicación del acto administrativo que convoca a la consulta, dificultando la comprensión de la autorización del proyecto.
El impacto ambiental del barrio cerrado Lagoon Hudson es motivo de preocupación para el Foro. Se destaca la proyección de arrojar desechos cloacales al Arroyo Baldovinos, ya contaminado, y el plan de llenar la laguna artificial «Crystal» con agua del acuífero, sin evaluar el impacto en la fuente de agua potable. También critican las perforaciones previstas en el acuífero y el avance sobre una laguna ocupada por aves migratorias.
El Foro Ambiental cuestiona la viabilidad ambiental del proyecto, señalando que el informe de evaluación ambiental no considera impactos relevantes y destaca la contradicción en que las empresas que buscan el permiso ambiental son las encargadas de elaborar dicho informe.
Recordando que la zona estaba inicialmente declarada como reserva, el Foro resalta la desafectación de esa categoría por parte del Municipio, violando el principio de no regresión en materia ambiental. La entidad insta a una revisión exhaustiva del proyecto y una consulta transparente que respete los principios ambientales establecidos en acuerdos internacionales.