En una situación de gran preocupación, los alumnos del Colegio Alemán de Quilmes centro fueron evacuados del establecimiento debido a una amenaza de bomba que generó un amplio despliegue de seguridad en la zona.
La amenaza de bomba fue recibida en el colegio ubicado en Garibaldi y Sarmiento de Quilmes Centro, lo que llevó a las autoridades a tomar medidas inmediatas para garantizar la seguridad de los estudiantes y el personal. Parte de los jóvenes fueron trasladados a la Plaza San Martín, mientras que otro grupo fue dirigido a la Plaza de la Cruz. Debido a las condiciones climáticas adversas de la mañana de este viernes, posteriormente fueron alojados en el edificio de la Escuela Municipal de Bellas Artes (EMBA).
Ante este tipo de situaciones, se activa un protocolo de seguridad que involucra la movilización de personal de Defensa Municipal, el Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) y la Patrulla Urbana de Quilmes. Además, se contó con la presencia de agentes de la Policía y los Bomberos Voluntarios de Quilmes, quienes trabajaron en conjunto para garantizar la seguridad de todos los presentes.
Las autoridades del colegio colaboraron estrechamente con las fuerzas de seguridad para llevar a cabo la evacuación de manera organizada y resguardar la integridad de los alumnos y el personal educativo. Asimismo, se realizó una exhaustiva revisión de las instalaciones con el objetivo de descartar cualquier amenaza y asegurar un regreso seguro al edificio.
La comunidad educativa del Colegio Alemán de Quilmes se mantuvo en constante comunicación con los padres y tutores de los estudiantes, brindándoles la información necesaria y tranquilidad en medio de esta situación inesperada.
Las autoridades locales y las fuerzas de seguridad continúan investigando el origen de la amenaza de bomba para determinar su veracidad y tomar las acciones legales correspondientes. Mientras tanto, se espera que las clases se reanuden en el Colegio Alemán de Quilmes una vez que se haya garantizado la seguridad en el edificio.
Tras los reiterados llamados que se realizan a distintas escuelas del distrito, esta alarmante modalidad no debe ser pasada por alto. Sin embargo, es muy común que las amenazas no sean reales y se impulsen con el objetivo de evitar cualquier evento educativo, lo cual es aún más grave, junto con la resolución que se había propuesto para implementar multas o aplicar penas de prisión que nunca se llevaron adelante.
La comunidad educativa y las autoridades locales enfatizan la importancia de tomar en serio cualquier amenaza de este tipo y colaborar activamente con las fuerzas de seguridad para garantizar la seguridad de todos en la comunidad escolar.