En las últimas semanas, los casos de COVID-19 han experimentado un notable aumento en Argentina, con focos de preocupación en la Ciudad de Buenos Aires, la Provincia de Buenos Aires, Chaco, Jujuy y Tucumán. Expertos sugieren que este incremento podría estar relacionado con la presencia de la subvariante JN.1, responsable de una ola global, aunque destacan que no hay motivo para alarmarse y subrayan la importancia de recibir las dosis de refuerzo de las vacunas contra el coronavirus.
El físico e investigador de Conicet, Jorge Aliaga, señaló que en las últimas dos semanas se ha observado un aumento en los casos. A nivel nacional, los casos diarios promedio han pasado de 84 en la semana del 18 al 24 de diciembre a 212 en la semana del 1 al 7 de enero. Sin embargo, Aliaga enfatizó que estas notificaciones representan solo una fracción de la realidad, ya que actualmente se realizan pocos hisopados.
En algunas provincias, el aumento es más evidente. Tucumán, por ejemplo, ha pasado de 21 casos diarios promedio a 97 en el mismo período, Jujuy de 3 a 23, Chaco de 3 a 11, y Buenos Aires de 15 a 34. En la Ciudad de Buenos Aires, también se ha registrado un incremento, pasando de 7 notificaciones diarias promedio a 17.
El ingreso de nuevas variantes ha coincidido históricamente con períodos de crecimiento de casos en Argentina, y los especialistas sugieren que la subvariante JN.1 podría ser la responsable en esta ocasión. La variante ha ganado prevalencia a nivel mundial, siendo la dominante en Estados Unidos y Europa, representando el 70% de las infecciones secuenciadas globalmente.
El virólogo Humberto Debat detalló que la subvariante JN.1 surgió como derivado de la variante BA.2.86, siendo declarada por la OMS como una variante de interés por separado. Aunque ha mostrado un aumento en la frecuencia de infecciones, Debat destacó que hasta la fecha no hay datos que sugieran que esta subvariante provoque casos más severos.
En términos de inmunización, se informa que las dosis de refuerzo han demostrado ser efectivas contra la JN.1, con un nivel de protección del 60% en poblaciones que han recibido refuerzos.
El médico infectólogo Pablo Scapelatto de la Ciudad de Buenos Aires enfatizó que el aumento de casos no debe generar alarma, pero subrayó la necesidad de reforzar las medidas de control y prevención, especialmente la vacunación. Recomendó que las personas mayores de 50 años o con comorbilidades reciban refuerzos cada 6 meses, mientras que el resto de la población debería vacunarse anualmente.