Cada 20 de junio, Argentina celebra el Día de la Bandera, una fecha que honra la memoria y el legado del prócer argentino Manuel Belgrano, creador de este símbolo nacional. El 20 de junio es un feriado inamovible en el calendario argentino y también se conoce como el Paso a la Inmortalidad del General Manuel Belgrano. Belgrano, político, abogado, escritor y militar, falleció el 20 de junio de 1820 en su casa natal, ubicada actualmente en la Avenida Manuel Belgrano al 430, en la ciudad de Buenos Aires. Su muerte fue el motivo por el cual se eligió esta fecha para conmemorar el Día de la Bandera.
Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, tal como figura en la certificación de su bautismo, nació el 3 de junio de 1770 en Buenos Aires. Además de su destacada participación en la Guerra de Independencia nacional, Belgrano es conocido por haber creado la bandera argentina. El primer izamiento de esta enseña se llevó a cabo el 27 de febrero de 1812 en la ciudad de Rosario, en un acto solemne durante la inauguración de dos baterías de artillería que protegerían las costas del Río Paraná de los ataques enemigos.
La idea de Belgrano de diseñar una bandera surgió a raíz de la necesidad de distinguir a las tropas criollas de las fuerzas realistas, que utilizaban banderas rojas. Ante el Triunvirato de Buenos Aires, Belgrano planteó la idea de crear un nuevo emblema para los soldados. Tomando como referencia la escarapela celeste y blanca, que ya había sido adoptada durante los días de la Revolución de Mayo, Belgrano propuso los mismos colores para la nueva bandera.
La escarapela fue bien recibida por los soldados, quienes encontraron en ella un símbolo de identidad en torno a su causa. En una carta dirigida a las autoridades nacionales, Belgrano expresó: «Las banderas de nuestros enemigos son las que hasta ahora hemos usado, abajo señor excelentísimo esas señales exteriores que para nada nos han servido y que parece que aún no hemos roto las cadenas de la esclavitud».
Aunque el diseño de la bandera nacional aún no había sido oficializado por el Triunvirato, Belgrano decidió confeccionarla y enarbolarla en el acto de apertura de los puestos defensivos. El primer ejemplar de la bandera argentina fue bordado por Catalina Echeverría y fue izado por primera vez el 27 de febrero de 1812 en la orilla del Río Paraná. Durante ese momento histórico, frente a las tropas del Regimiento N°5, Belgrano pronunció las palabras: «Soldados de la patria, juremos vencer a nuestros enemigos interiores y exteriores y la América del Sur será el templo de la independencia, de la unión y de la libertad. En fe de que así lo juráis, decid conmigo: ¡Viva la Patria!».
Esta bandera acompañó a Belgrano durante su campaña en el Alto Perú y se perdió en la historia hasta que, en 1883, fue encontrada detrás de un cuadro en la capilla de Titirí, al norte de Bolivia, en la ciudad de Macha. Investigaciones posteriores demostraron que ese lugar sirvió de refugio para las tropas criollas después de su derrota en Vilcapugio, y el párroco de Titirí la resguardó en su iglesia para evitar que cayera en manos españolas tras la caída en Ayohuma.
Después de ser devuelta a Argentina por el estado boliviano, la histórica bandera fue restaurada y actualmente se conserva en el Museo Histórico Nacional, siendo un tesoro invaluable que representa la lucha por la independencia y la identidad nacional de Argentina.
El Día de la Bandera se celebra en las escuelas como una jornada de reflexión, en la cual los alumnos renuevan su juramento de lealtad a la bandera. Esta fecha nos invita a recordar y valorar el legado de Manuel Belgrano, un hombre que dedicó su vida a la causa de la independencia y dejó como legado uno de los símbolos más queridos y representativos de la nación argentina: nuestra amada bandera.
