El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, unieron esfuerzos para abordar la preocupante problemática de la fuga de presos de las comisarías en la Ciudad de Buenos Aires. En una conferencia de prensa conjunta, anunciaron un conjunto de medidas destinadas a fortalecer el sistema de alcaidías y comisarías.
El acto, encabezado por Jorge Macri, dio inicio con la presentación de nuevas iniciativas dirigidas a mejorar la infraestructura y condiciones de seguridad en las dependencias policiales de la Ciudad. Entre las medidas destacadas se encuentran la creación de una alcaidía con capacidad para 400 plazas, la instalación de 2.000 tobilleras electrónicas y la deportación de extranjeros que delinquen en el territorio.
La ministra Patricia Bullrich subrayó la importancia de una política de seguridad compartida que priorice la protección de la ciudadanía y las víctimas del delito. Destacó la necesidad de actuar con determinación para capturar a los prófugos y garantizar la seguridad en las calles.
En este contexto, tanto el jefe de Gobierno porteño como la ministra Bullrich coincidieron en la importancia de otorgar mayor autonomía a la Ciudad de Buenos Aires en materia de Justicia Penal. Jorge Macri expresó la necesidad de avanzar en este sentido para eliminar las complicaciones que surgen en la gestión de detenidos en la Ciudad.
En cuanto a las medidas concretas, el Gobierno porteño impulsará la construcción de una Alcaidía Central en la zona sur de la Ciudad, la instalación de 19 módulos de detención en distintas comisarías y el retorno de las obras en el Complejo Penitenciario Federal II de Marcos Paz.