En un giro financiero crucial para el Club Atlético Independiente, la institución de Avellaneda logró saldar una deuda pendiente con el Club Pescara de Italia, permitiendo así la habilitación de sus refuerzos para la participación en los encuentros.
La situación se remonta a mediados de 2022, cuando el uruguayo en cuestión se incorporó al club durante la gestión de los Moyano. Sin embargo, a pesar de la transacción, el acuerdo económico nunca fue cumplido por parte de Independiente. Esto llevó al club italiano a tomar medidas y, después de 18 meses de espera, presentó una demanda ante la FIFA.
La máxima entidad del fútbol mundial respaldó la posición del conjunto europeo, resultando en la inhibición de Independiente para utilizar a los futbolistas incorporados hasta saldar la deuda pendiente, estimada en 400 mil dólares.
La situación generó preocupación en el seno del club argentino, que se vio impedido de contar con sus nuevos jugadores en la primera parte de la temporada. Sin embargo, en un reciente giro de los acontecimientos, Independiente realizó el giro correspondiente para abonar la deuda, lo que permitió la acreditación del pago hoy.
Este paso significativo libera a Independiente de las restricciones impuestas por la FIFA, permitiendo a los futbolistas que se incorporaron durante el último mercado de pases participar en los próximos encuentros, incluido el partido contra Independiente de Rivadavia programado para mañana, así como durante el resto del año.