A partir de un reciente anuncio, la línea Roca experimentará una reducción significativa en su oferta diaria, afectando a 70 servicios por día en diversos ramales. La medida, que se mantendrá hasta nuevo aviso, impacta principalmente en los primeros trenes de la mañana y los últimos de la noche, así como en algunos servicios diurnos y rápidos.
La nueva programación ya se encuentra disponible en la página web de Trenes Argentinos (SOFSE). Según un informe de www.enelsubte.com, el recorte representa casi el 10% de la oferta diaria. Con los nuevos horarios, el último tren con destino a La Plata en días hábiles partirá de Plaza Constitución a las 22.17 (anteriormente a las 22.42), y el último tren desde La Plata hacia Constitución saldrá a las 22.16 (anteriormente a las 22.49).
En el ramal a Bosques vía Quilmes, se cancelarán en total nueve trenes diarios, incluyendo algunos matutinos, aunque el horario del último tren no se verá afectado.
En el ramal a Bosques vía Temperley, el último tren desde Constitución saldrá a las 22.21 (anteriormente a las 22.34), mientras que el último tren desde Bosques hacia Constitución vía Temperley será a las 22.25 (anteriormente a las 22.37).
En el ramal a Ezeiza, el último tren en días hábiles desde Constitución saldrá a las 22:48 (anteriormente a las 23.05), y el último servicio desde Ezeiza hacia Constitución, a las 22.56, no sufrirá cambios.
Los últimos trenes hacia Glew y Alejandro Korn mantienen sus horarios sin modificaciones.
Extraoficialmente, han circulado dos versiones sobre las razones detrás de este recorte. La primera sugiere que se reducirá la cantidad de rotaciones diarias de las formaciones para ahorrar en gastos de mantenimiento, mientras que la segunda versión plantea la retirada de servicio de las formaciones Toshiba, cuyo mantenimiento se ha vuelto cada vez más complicado. Aunque esta última versión ha encontrado eco entre los trabajadores, hasta el momento, los trenes Toshiba continúan en circulación sin cambios.
Es importante recordar que desde hace varios años está pendiente la adquisición de 200 coches CRRC adicionales, lo que permitiría jubilar a los trenes Toshiba sin reducir la oferta de servicios en los distintos ramales de la línea Roca. Sin embargo, la compra está supeditada a financiamiento chino.