El chofer fue violentamente agredido y desde su entorno denunciaron que no hubo presencia policial a pesar de que todo ocurrió a media cuadra de un destacamento del barrio La Ribera de Quilmes. “No había nadie”, señalaron.
El hecho ocurrió en la madrugada del sábado pasado en la avenida Otamendi y Lora, cuando cerca a las 5:30 de la mañana se subieron dos delincuentes al interno 89 de la línea 278 que se dirigía sentido al centro de Quilmes.
Allí, los malvivientes atacaron a fierrazos al conductor y le robaron su reloj, el celular y otras pertenencias. Tras la feroz golpiza, huyeron rápidamente sin robarles a los 5 pasajeros que viajaban a bordo de la unidad.
Los pasajeros y familiares del chofer agredido mostraron su indignación y denunciaron que no hubo ningún agente policial en el destacamento que se ubica a apenas 50 metros del hecho. “Lo más indignante de esto es que a media cuadra (debajo de la autopista) está el puesto de policía pero no había nadie” relató María, esposa del conductor.
Y agregó que “llamaron al 911 y nunca fue nadie”. Él tuvo que terminar su recorrido y a la vuelta paró en la comisaría primera para hacer la denuncia y tardó casi tres horas en desocuparse a causa de todos los casos de robos que tenían que atender”.
No es la primera vez que sucede un hecho delictivo violento en esa cuadra, ya que a fines del año pasado, vecinos de la ribera atraparon a un delincuente armado que robaba en el mismo lugar, a 50 metros del puesto policial.